Mery, Paul y Stella McCartney son el principal rostro del movimiento de los lunes sin carne
UVA PRESS
Internacional
LUNES SIN CARNE
“Renuncia a cualquier producto animal al menos un día a la semana. Mejora tu
salud y la del planeta”.
por Natalia Martín Cantero*
La violencia comienza por el tenedor, solía decir Gandhi.
El vegetariano más famoso de todos los tiempos no es el único en dar al humilde
cubierto un poder extraordinario: la organización Lunes
sin carne, respaldada por un grupo
de agrupaciones de salud pública de EEUU y Gran Bretaña, cree
que un sencillo tenedor puede convertirse en un arma capaz de transformar el
mundo.
Esta asociación sin ánimo de lucro invita a comenzar de
forma modesta evitando el consumo de carne y cualquier otro alimento de origen
animal los lunes (u otro día de la semana). La versión española, que aterrizó
recientemente, sigue la estela de los 25 países donde la iniciativa está en
marcha, en algunos casos con gran éxito.
En Bélgica, ciudades enteras como Brujas o Gante se han
sumado a la iniciativa implantando menús sin carne en los centros escolares.
Otro ejemplo: el hotel Nordic Light, en Estocolmo (Suecia) presenta a sus
clientes una carta sin carne un día a la semana.
Las consecuencias para la salud son notables. El exceso de
carne en la dieta se relaciona con el riesgo de padecer cáncer y otras
enfermedades. Las dietas ricas en frutas y verduras, por otra parte, reducen el
riesgo de enfermedades cardiovasculares y diabetes.
La salud de los carnívoros no es la única que sale ganando
con este día de “dieta”. En su informe La larga sombra del ganado, la FAO
(Organización de las Naciones Unidas para el Alimento y la Agricultura)
señalaba ya en 2009 que las emisiones de gases de efecto invernadero asociadas
a toda la cadena de producción de carne representan una quinta parte de las emisiones
mundiales totales: nada menos que el 18%, incluyendo emisiones procedentes de
la deforestación (provocada por los criadores de ganado), el transporte de la
carne y la producción industrial del alimento, etc.
Lunes sin carne asegura que, si la población de EEUU
renunciase a productos animales solamente un día a la semana, la cantidad de
emisiones que se reducirían equivaldría a la que se produciría si toda la
población se pasase a conducir coches híbridos. Se evitaría el consumo de más
de 45.000 millones de litros de gasolina y se ahorraría suficiente agua como
para que cada persona pudiera llenar su bañera aproximadamente 20 veces al año.
Este último punto es crucial. Hace unos días, la ONU
destacaba, con motivo de la celebración del Día Mundial del Agua, que hacen
falta entre 1.000 y 3.000
litros de agua para producir un kilo de arroz, y 7.000
para un filete de ternera.
“No estamos pidiendo que te hagas vegetariano o que te
conviertas en abogado de los derechos de los animales (aunque eso sería maravilloso).
Pedimos que, simplemente, asumas el compromiso de no comer carne una vez a la semana. Ninguna
otra acción resultará tan simple y tan poderosa para hacer algo por el
planeta”, señala Andrea Ripoll, de Lunes sin carne en España, una de las
participantes en el encuentro sobre alimentación vegetariana organizado por
Coplanet que se celebró el fin de semana en Madrid.
¿El pescado es la solución? La respuesta es un rotundo no.
Los expertos advierten de la extinción en masa de los océanos. En cuanto a las
piscifactorías, los problemas que ocasionan son similares a los de las granjas
ganaderas. Como apunta el documental Sea the truth, que vaticina el final de
los océanos para el 2048, no hay tal cosa como pesca sostenible.
“Hay que comer con más consciencia”, señala Ripoll. “Eso
traerá consigo una ética y una forma de ver las cosas diferentes. Cuanto más
respetuosos seamos con nosotros mismos, también lo seremos con el medio
ambiente y con los animales”.
¿Por dónde empezar? Por informarse bien, sin duda. “Una
dieta vegetariana puede satisfacer todas las necesidades proteicas”, asegura
Mar García, miembro de Unión
Vegetariana Española. Y no es necesario ingerir todas las proteínas en la
misma comida. “Si tienes una dieta variada, el cuerpo almacena aminoácidos
esenciales para usar las proteínas que necesite más adelante”, indica.
Consumimos muchas más proteínas de las que necesitamos. Una
alimentación con una alta proporción de proteína animal puede derivar en
descalcificación ósea, entre otros problemas. En cuanto al consumo de grasas,
“no hay ninguna razón nutricional por la que consumir grasas animales”, apunta
García. La clave, de nuevo es
informarse. A todos los niveles.
Como señala Paul McCartney (muy activo en el movimiento
Lunes sin carne), “si los mataderos tuvieran paredes de cristal, todos seríamos
vegetarianos”.
*Natalia
Martín Cantero es periodista. Si quieres ponerte en contacto
con ella escribe a natalia@vidasencilla.es
Fuente: El País.com
Foto: Gtresonline